- Tirala al agua a esa Boguita, es un alfiletero!!!
Esta es la expresión más común cuando se pesca algo
chico, y el pez se salva por qué no sería comestible.
- Andá Boguita, llama a tu papá o volvé cuando seas más
grande!!!...
Típico mensaje del pescador al pez que va a “tirar al
agua”, añorando una buena pieza, que cuanto más grande mejor para llevarla la
cocina de su hogar.
Después aparece un segundo razonamiento en los
pescadores (no siempre), como una evolución en el pensamiento, donde tirar el
pez chico al agua pareciera tener un sentido proteccionista, aunque estoy casi
seguro de que no sabe por qué, tal vez un pez chico da cierto remordimiento
matarlo, como que es mas “inocente”.
Y así se van formando diferentes niveles y métodos más
prolijos de protección, hasta quien no mata un solo pez sin importar especie ni
tamaño y los devuelve al río mansamente… Esto sin pensar siquiera en las
difusas y complejas normas que regulan la pesca, simplemente desde el sentido común
de quien se acerca al agua para hundir un anzuelo.
A partir de una traducción del articulo Fishing; More Protection for Big
Ones con la colaboración de amigos pescadores,
armo un resumen para que sea más fácil de entender el por qué del título de
esta nota, tema vigente y discutido varias veces, siendo que aquí se
aprecian una serie de argumentos interesantes.
En resumen, se propone definir un rango de extracción,
poner tallas de máxima y mínima para dar muerte a un pez, no como hasta ahora
que solo se define una talla de mínima y no tiene limite hacia arriba, como en
la mayoría de los reglamentos de pesca del Litoral.
El principal motivo se sustenta en la reproducción de
los peces, hoy la talla mínima se define para que los peces, antes de ser sacrificados,
al menos alcancen una madurez reproductiva para que logren como mínimo un
primer desove.
Nuevos estudios definen que los grandes reproductores
son fundamentales para la repoblación, si estos son sacrificados se favorece a
los jóvenes reproductores que son mas inexpertos y tienen un rendimiento
productivo menor. Se demuestra también que los grandes reproductores no solo
producen desmesuradamente más huevos que los pequeños, sino también huevos más
grandes con una descendencia más resistente.
A diferencia de muchos mamíferos, los peces crecen
durante toda su vida y se reproducen hasta avanzada edad, y desde el punto de
vista ecológico, es mejor si una población de peces está compuesta por
diferentes edades y tamaños. Los peces de distintos tamaños y edades se
reproducen en diferentes momentos, entonces si una acontecimiento cualquiera
destruyese el ambiente del desove en un tiempo puntual, queda un respaldo en la
diversidad de edades reproductivas. Por otro lado, también se logró demostrar
que los peces jóvenes y viejos tienen diferentes lugares para permanecer,
diferentes rutas de migración, y diferentes planes nutricionales, si se
mantiene como hasta ahora una explotación que solo protege a los más jóvenes,
afectará no solo a la performance reproductiva, sino también a toda la cadena
alimentaria y el ecosistema.
Por eso se recomienda un “rango de extracción” que
quedaría ubicado entre una talla mínima para proteger a los más jóvenes y una
talla máxima para proteger a los más viejos.