En este blog se trata de SEGUIR PESCANDO a través del texto para mantenernos conectados con la pesca. Y el de promover diferentes acciones o actitudes para que podamos SEGUIR PESCANDO a través del tiempo.
Aquí encontré la forma de agrupar y compartir algunos textos publicados en diferentes medios donde tomé participación, con el solo interés de difundir mis experiencias y opiniones.
Espero continuar agregando notas que puedan tener interés en los lectores que quieran SEGUIR PESCANDO.

lunes, 6 de enero de 2014

Pesca, más protección para “los grandes”.



















- Tirala al agua a esa Boguita, es un alfiletero!!!
Esta es la expresión más común cuando se pesca algo chico, y el pez se salva por qué no sería comestible.
- Andá Boguita, llama a tu papá o volvé cuando seas más grande!!!...
Típico mensaje del pescador al pez que va a “tirar al agua”, añorando una buena pieza, que cuanto más grande mejor para llevarla la cocina de su hogar.
Después aparece un segundo razonamiento en los pescadores (no siempre), como una evolución en el pensamiento, donde tirar el pez chico al agua pareciera tener un sentido proteccionista, aunque estoy casi seguro de que no sabe por qué, tal vez un pez chico da cierto remordimiento matarlo, como que es mas “inocente”.
Y así se van formando diferentes niveles y métodos más prolijos de protección, hasta quien no mata un solo pez sin importar especie ni tamaño y los devuelve al río mansamente… Esto sin pensar siquiera en las difusas y complejas normas que regulan la pesca, simplemente desde el sentido común de quien se acerca al agua para hundir un anzuelo.

A partir de una traducción del articulo Fishing; More Protection for Big Ones con la colaboración de amigos pescadores, armo un resumen para que sea más fácil de entender el por qué del título de esta nota, tema vigente y discutido varias veces, siendo que aquí se aprecian una serie de argumentos interesantes.

En resumen, se propone definir un rango de extracción, poner tallas de máxima y mínima para dar muerte a un pez, no como hasta ahora que solo se define una talla de mínima y no tiene limite hacia arriba, como en la mayoría de los reglamentos de pesca del Litoral.
El principal motivo se sustenta en la reproducción de los peces, hoy la talla mínima se define para que los peces, antes de ser sacrificados, al menos alcancen una madurez reproductiva para que logren como mínimo un primer desove.
Nuevos estudios definen que los grandes reproductores son fundamentales para la repoblación, si estos son sacrificados se favorece a los jóvenes reproductores que son mas inexpertos y tienen un rendimiento productivo menor. Se demuestra también que los grandes reproductores no solo producen desmesuradamente más huevos que los pequeños, sino también huevos más grandes con una descendencia más resistente.
A diferencia de muchos mamíferos, los peces crecen durante toda su vida y se reproducen hasta avanzada edad, y desde el punto de vista ecológico, es mejor si una población de peces está compuesta por diferentes edades y tamaños. Los peces de distintos tamaños y edades se reproducen en diferentes momentos, entonces si una acontecimiento cualquiera destruyese el ambiente del desove en un tiempo puntual, queda un respaldo en la diversidad de edades reproductivas. Por otro lado, también se logró demostrar que los peces jóvenes y viejos tienen diferentes lugares para permanecer, diferentes rutas de migración, y diferentes planes nutricionales, si se mantiene como hasta ahora una explotación que solo protege a los más jóvenes, afectará no solo a la performance reproductiva, sino también a toda la cadena alimentaria y el ecosistema.

Por eso se recomienda un “rango de extracción” que quedaría ubicado entre una talla mínima para proteger a los más jóvenes y una talla máxima para proteger a los más viejos.